Con 8,3 millones de cabezas, de las cuales 3,8 millones son vacas lecheras, Francia se encuentra en primera fila de la producción lechera de la Unión Europea. Esta masa reúne gran diversidad de razas, entre las cuales se cuentan la Prim’Holstein (2,5 millones de vacas lecheras), la Montbéliarde (665 000), y la Normande (426 000). En conjunto con la Abondance, la Simmental francesa, la Pie-rouge des Plaines, la Brune y la Tarentaise, estas ocho razas cuentan con programas modernos y eficaces de selección, que son fuente de un progreso genético importante y regular.
La riqueza pecuaria francesa ofrece una paleta genética excepcional, que responde a la variedad de necesidades de los ganaderos, a diferentes contextos de cría y de cadenas productivas. Incluye tanto razas con alta producción y de importancia internacional, como razas bien adaptadas a condiciones forrajeras y climáticas difíciles.
El sistema francés de mejoramiento genético de estas razas es conducido por France Génétique Elevage, que reúne a todos los actores de los programas franceses de selección.
Los programas franceses combinan selección sobre ascendencia, acoplamientos razonados, genotipificación, registros zootécnicos y controles de descendencia.
En constante mejora, integran los últimos progresos tecnológicos y científicos, en especial en términos de seguridad sanitaria y evaluación genómica.
Dentro de la preocupación por la coherencia y el rigor, los protocolos técnicos de cada etapa son idénticos para todas las razas; son definidos a nivel nacional por el Institut de l’Elevage, a cargo de la supervisión y de la asistencia técnica a los programas de selección.
Diversidad y complementariedad de los criterios de selección
Cada raza define sus objetivos de selección, integrando de manera equilibrada aptitudes precisas y diversas:
Para cada una de estas características se publican índices de valor genético. Un índice global (ISU) sintetiza el conjunto de los criterios, de acuerdo a una ponderación específica para cada raza.
Cada ganadero puede así elegir el reproductor que le conviene de acuerdo a la combinación de aptitudes más apropiada a sus objetivos y a su explotación, en Francia o en el mundo.
INDICE GLOBAL DE SINTESIS (ISU) EN RAZA PRIM’HOLSTEIN
La evaluación genética se apoya en:
Para garantizar su integridad, todos los datos zootécnicos y genéticos son registrados a través de un solo y único Sistema Nacional de Información Genética. La base nacional de datos genéticos es, sin duda, la más amplia a nivel mundial: reúne información sobre más de 150 millones de bovinos; dentro de ella, por ejemplo, unos 600 millones de resultados elementales de control lechero.
El cálculo de los índices genéticos y la consideración de todas las relaciones de parentesco reposan sobre los más modernos métodos estadísticos (Blup modelo animal, etc.).
Bajo la responsabilidad del Estado, estas evaluaciones genéticas son realizadas por el Instituto Nacional de Investigación Agronómica.
Para todos los animales de una misma raza, incluyen siempre las mismas características. Su índice se expresa siempre en desviación con respecto a una base, reevaluada anualmente tomando en cuenta los avances genéticos realizados. Actualizados 3 veces al año, los índices son dados a conocer oficialmente por el Institut de l’Elevage.
Desde hace más de 40 años, los únicos toros franceses difundidos a gran escala por inseminación animal son aquellos cuya superioridad genética ha sido comprobada mediante el control de su descendencia o bien, desde 2009, por evaluación genómica.
Los machos jóvenes preseleccionados para ser controlados en su descendencia provienen de acoplamientos planificados que combinan la búsqueda de cualidades específicas con el mantenimiento de una amplia diversidad genética. La elección final es rigurosa. Sólo 25% de los jóvenes machos preseleccionados entran finalmente en prueba de descendencia.
Para cada joven toro elegido se realizan 300 a 1000 inseminaciones en otras tantas ganaderías. Todas las hembras resultantes son controladas en su producción, sus características funcionales y su morfología.
De acuerdo a índices calculados en función de esos resultados, sólo 20% de los toros analizados son escogidos para difusión mediante la inseminación animal.
Desde 2002, los programas de selección de las razas Prim’Holstein, Montbéliarde y Normande integran la información genómica obtenida después de análisis de ADN. Desde 2009, todos los ganaderos pueden acceder a esta oferta genética completa y de nueva generación para elegir sus toros. Los índices genómicos incluyen todas las características (unas cuarenta) evaluadas hasta entonces por prueba de descendencia.
Estas evaluaciones genómicas son realizadas por el INRA y la UNCEIA (que reúne a las empresas de selección), con la participación del Institut de l’Elevage. Su gran confiabilidad se basa en el gran tamaño de las poblaciones de referencia (animales que disponen tanto de evaluaciones genómicas como clásicas) sobre las cuales se apoyan: 1250 toros para la raza Normande, 1500 para la raza Montbéliarde y 18300 para la raza Prim’Holstein, dentro del marco del proyecto Eurogenomics.
La exitosa integración de esta revolución tecnológica ha permitido un avance genético todavía más rápido en todas las aptitudes seleccionadas (cantidad y calidad de la producción, características funcionales). Permite también ofrecer una gama más amplia de reproductores, en términos de diversidad genética, resultados (longevidad, resistencia a las enfermedades, etc.) y otros criterios buscados (color rojo, sin cuernos, etc.).
En 2010, Francia fue uno de los primeros países cuyo método de evaluación genómica fue oficialmente validado por Interbull. La experiencia adquirida va permitir extenderlo con el mismo éxito a las otras razas bovinas lecheras.
Desde hace más de 20 años, el progreso genético anual de las tres principales razas francesas es de 65 a 100 kg de leche. En 10 años, la producción media de una vaca francesa Prim’Holstein ha aumentado así en 1000 kg por lactación, exclusivamente gracias al mejoramiento genético de la raza.
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Los palmarés internacionales oficiales publicados por Interbull demostran regularmente la excelencia de esos resultados, reconocidos por su precisión y confiabilidad. Desde 1995, los toros franceses se encuentran entre los mejores del mundo.En la evaluación internacional Interbull de agosto de 2010, 30 de 154 toros Holstein que superaron 165 puntos ISU fueron franceses. Este resultado ubica a Francia en 2ª posición a nivel mundial.
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