Las etapas de la selección
Los objetivos de selección

 Una primera etapa indispensable

Los animales de ganadería se seleccionan con el fin de responder a objetivos. La primera etapa indispensable de un programa de selección, y luego para su evolución o su reorientación, consiste por lo tanto en definir con precisión los objetivos de selección perseguidos. Se traducen por un conjunto de caracteres que se desea mejorar, con sus ponderaciones relativas.

Los objetivos incluyen con frecuencia una combinación de caracteres de producción y de calidad de los productos, pero también morfológicos y funcionales. Con el fin de ser eficaces, estos criterios de selección deben tener una buena capacidad de herencia y ser fácilmente mensurables en los individuos (o en los emparentados). Se han complicado con el tiempo, para tener en cuenta demandas cada vez más variadas.

 Criterios de selección adaptados a la finalidad de cada raza

Actualmente, los objetivos de los programas franceses de selección de las razas lecheras están orientados a la toma en cuenta equilibrada (según una ponderación específica a cada una de ellas) de distintos criterios relativos a:

• las aptitudes de producción (cantidad de leche, cantidad y tasa de materia proteica para la transformación de la leche en queso, cantidad y tasa de materia grasa);
• las aptitudes funcionales (facilidad de parición, fertilidad, longevidad, resistencia a las infecciones de la ubre, etc.),
• las aptitudes morfológicas (por ejemplo conformación de la ubre para una buena adaptación al ordeño mecánico, etc.).

En razas de carne, los criterios de selección conciernen en particular:

• a las aptitudes maternas de las hembras, para que puedan hacer nacer, alimentar y criar a sus terneros/corderos sin problema: fertilidad, facilidad de parición/parto de oveja, capacidad de lactancia, comportamiento materno, prolificidad, etc.
• a las aptitudes carniceras de los productos (terneros, corderos): conformación muscular, aptitud para producir preferencialmente músculo más que grasa, velocidad de crecimiento, rendimiento de carcasa, etc.

Desde el principio de los años 2000, los progresos del análisis genómico han permitido abrir nuevas perspectivas. Por ejemplo, ya han permitido añadir criterios específicos relativos a la erradicación de genes de sensibilidad a determinada enfermedad (tembladera epidémica en producción ovina).

Criterios como la composición fina de la leche (caseína, triglicéridos, etc.) y la calidad de la carne (suavidad, jugosidad, sabor, etc.) se tendrán en cuenta en el futuro de manera fiable en los programas de selección (programas de investigación Phenofinlait y Qualvigène).

 Responder a las necesidades de los ganaderos y de las cadenas productivas

La finalidad de todos los programas franceses de selección de las razas bovinas, ovinas y caprinas es permitir a cada raza responder lo mejor posible a las necesidades de los distintos eslabones de la cadena productiva, de los ganaderos a los consumidores. Se trata de optimizar su potencial y de orientar su evolución en función de la de los sistemas de producción y de los mercados.

Por ello, la definición y la revisión periódica de los objetivos de selección (definición de los caracteres prioritarios y ponderación entre sí) de cada raza es en Francia el fruto de decisiones concertadas entre los representantes de los distintos actores de la cadena productiva, del ganadero al distribuidor. A tal efecto, existe una Organismo de Selección para cada una de ellas

 El Organismo de Selección (OS): el “parlamento” de la raza

Cada Organismo de Selección, verdadero “parlamento” de la raza concernida, está constituida por 3 colegios:

1. el colegio “creación del progreso genético” que reúne a los ganaderos “selectores” del núcleo de selección (Herd Book)
2. el colegio “difusión del progreso genético” que agrupa a los centros de servicio de inseminación animal y las agrupaciones de venta de reproductores en vivo.
3. el colegio “utilización del progreso genético” constituido por cooperativas de comercialización del ganado, el aval de las cadenas productivas (frigoríficos, transformadores, distribuidores, etc.) y los socios del desarrollo de la ganadería (EDE, Bovin-Croissance, France Conseil Elevage, etc.)

Con la asistencia técnica del INRA y del Institut de l’Elevage, estas organizaciones, acreditadas por el Ministerio de Agricultura, tienen la responsabilidad de la definición de las orientaciones raciales (objetivos de selección) pero también de:

• la definición de las características de la raza y la certificación (o no) de la pertenencia de un animal a esta raza;
• el mantenimiento del libro genealógico y la gestión del archivo racial, base de datos informatizada que contiene toda las informaciones sobre los animales de la raza;
• la entrega de los documentos oficiales de los reproductores (pedigrí o certificado de exportación, fichas individuales, etc.);
• la evaluación de morfología racial (elección de las tablas de puntuación, recogida y registro de los datos morfológicos);
• la calificación (recomendación de empleo) de los reproductores (jóvenes machos, novillas, vacas, toros) en función de sus índices de evaluación genética (durante el destete, post-destete o IBOVAL);
• la promoción en Francia y en el extranjero de la raza, de su programa de selección, y del conjunto de su material genético (reproductores, semen, embriones).